En 1866, el 28 de octubre nació Ramón José Simón del Valle Peña, que
años más tarde se hizo llamar Ramón María del Valle-Inclán.
Su casa natal fue la Casa del Cuadrante, la casa de su abuela, aunque
su domicilio familiar era la Casa de Cantillo.
Inició sus estudios de Bachillerato en Santiago, pero los terminó en
Pontevedra.
Empezó a estudiar Derecho en Santiago (su padre quería que fuese abogado),
pero en 1890 muere su padre, abandona sus estudios y se traslada
a Madrid.
En 1897 tras un incidente le amputan su brazo izquierdo.
En 1907 comienzan los trastornos de salud y guarda cama con frecuencia.
En 1908 nace su primera hija Concha y en 1911 muere su madre.
En 1913 viaja a Madrid y en 1914 nace su segundo hijo Joaquín María que
fallece a los pocos meses.
En 1917 nace su tercer hijo Carlos Luis y en 1921 nace su cuarto hijo
Jaime Clemente.
Viajó a México y Cuba en varias ocasiones a realizar actividades oficiales
y privadas, y en 1923 marcha a vivir a la Puebla.
En otoño es operado de un tumor de vejiga en Santiago, y en 1925 se instala
en Madrid.
En 1933 se opera de una recaída de su antigua enfermedad y en 1934 se
reproduce su hematuria y regresa a Madrid.
En marzo de 1935, muy enfermo, vuelve a Galicia e ingresa en una clínica
de Santiago, donde el 5 de enero de 1936 muere y su cuerpo es enterrado
en el cementerio de Boisaca, en Santiago.
Ramón Mª del Valle-Inclán fue el escritor que alcanzó genuinamente la
onda de fecundidad creativa que iluminó la renovación de la literatura
a principios del s. XX ; pero no resulta extraño, ya que era un
hombre receptivo a todo aquello trascendental que ocurriese en el
mundo, en sus años de vida. Con ayuda de su imaginación creó un
mundo en el que su vida pudiera tener más significado, además de
vivirla entre otros seres humanos.
Valle-Inclán resulta una figura compleja, que a medida que crecía en
edad y experiencia, se hacía más consciente del artista que llevaba
dentro, y luchó por expresarlo en sus obras. El proceso hizo necesaria
una gran agitación de su latente individualidad, y poco a poco este
proceso de autocrítica también se hizo notar en el contexto de su
pensamiento, actitud vital y por supuesto, en sus obras.
Este destacado dramaturgo, novelista,
poeta y estético de la “Generación del 98” que tanta influencia
tuvo en la literatura española, sigue permaneciendo hoy en día,
ya que resulta un ser de proporciones memorables.